Porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa.
Hebreos 10:36
Hay dos palabras griegas que traducen como paciencia, estudiaremos hoy una de ellas:
Hupomonē del G5281
Soportar, permanecer bajo, perseverar, paciencia continua, esperando.
Esta palabra hace referencia a la parte del carácter que no nos permite rendirnos ante las circunstancias o desfallecer ante las pruebas; de esta manera podríamos decir que hupomone es perseverar ante situaciones o circunstancias, esta palabra es traducida en la biblia como “paciencia o constancia”. Bíblicamente esta paciencia “hupomone” es alimentada por la esperanza, toma su fuerza no de una esperanza que podría suceder, sino de la esperanza de algo que debe suceder.
Una clara muestra de este tipo de paciencia alimentada por la esperanza la encontramos en Santiago 5:11
He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia “hupomone” de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo.
Job poseía paciencia; el tipo de paciencia que es alimentada por la esperanza, en medio de gran sufrimiento. El había perdido todo; sus hijos, sus bienes, su salud, su esposa le pedía que maldijese a Dios, y Sus amigos pensaban que el había pecado. A pesar de todas estas circunstancias Job se mantuvo integro.
¿Que podría haber hecho que Job se mantuviera integro delante de Dios durante todo este proceso de profundo sufrimiento? ¿Alguna vez te lo has preguntado?
¡La esperanza! Esa que produce paciencia en medio del dolor. Job dijo “Mas él conoce mi camino; Me probará, y saldré como oro. Mis pies han seguido sus pisadas; Guardé su camino, y no me aparté.”. Me probara y saldre como oro! Esa era su esperanza, salir como oro delante de su Dios…….
Amiga no se que clase de sufrimiento puedes estar enfrentando hoy; el a veces nos toma por sorpresa, algunas otras lo vemos venir, como quiera que sea el sufrimiento nos purifica, seremos probadas y saldremos como oro, el proceso nos deja cicatriz, para que luego podamos recordar que la paciencia tiene su obra completa.
Pero cual es nuestra esperanza; si no la de ser hechas conforme a la imagen de Cristo!
Por tanto, todos nosotros mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
Durante tiempos de prueba hay dos verdades que nos ayudan a desarrollar paciencia,
una es, ¡que veremos a Dios! Le veremos tal y como es El. ¡Aleluya! Veremos su amor, su cuidado, su misericordia, su fidelidad, le veremos cargándonos en sus brazos de amor.
la esperanza de Job está bien cimentada, por lo cual pudo perseverar hasta el fin.
Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo;
Y después de deshecha esta mi piel,
En mi carne he de ver a Dios;
Al cual veré por mí mismo,
Y mis ojos lo verán, y no otro,
Aunque mi corazón desfallece dentro de mí.
Job 19:25-27
Job esperaba durante el tiempo de la prueba ver a Dios, en un hecho futuro basado en una esperanza de algo que debería suceder, esta preciosa esperanza lo lleno de paciencia y al final obtuvo lo que debía suceder!
Respondió Job a Jehová, y dijo:
Yo conozco que todo lo puedes,
Y que no hay pensamiento que se esconda de ti.
¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento?
Por tanto, yo hablaba lo que no entendía;
Cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía.
Oye, te ruego, y hablaré;
Te preguntaré, y tú me enseñarás.
De oídas te había oído;
Mas ahora mis ojos te ven.
Job 41.1-5
¡Mas ahora mis ojos te ven! Ya había pasado, la paciencia había tenido su obra completa, el resultado; sus ojos espirituales habían visto a su creador, ahora el podía ver el propósito; tú me enseñaras…..
La otra es tener la certeza de que ¡Dios está obrando! El nos sacara como oro, usara el sufrimiento para bien en nuestras vidas.
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.
2 Corintios 1:3,4
Fuimos creadas para la alabanza de su gloria! Qué gran privilegio ser parte de la consolación de Dios, que él nos use para consolar a nuestros hermanos, ¡no es maravilloso!
Las lágrimas hacen que podamos ver mejor, porque podemos ver a través de los ojos de Dios.
¿Tienes tus ojos abiertos para ver a Dios en medio del dolor?
¿Están tus ojos atentos para ver donde Dios te usara para su gloria?
¿Cual es tu esperanza?
Mas tenga la paciencia “hupomone” su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.
Santiago 1:4
Foto por carlosm76
