Sonríele SIEMPRE a tus Hijos

Durante mis primeros días de madre leí un pequeño consejo que tocó mi vida profundamente:

“Sonríele a tus hijos cada cinco minutos.” ~Debbi Pearl

Por naturaleza, tengo una personalidad seria. Me gusta concentrarme en lo que hago y siempre he preferido buscar el lado serio sobre el lado humoroso de las cosas. Así que nunca consideré como mi seriedad, o mejor dicho mi falta de sonrisas, afectaría en la crianza de mis hijos.

Pero al leer el consejo anterior, me di cuenta del beneficio en la vida y carácter de mis hijos. Era algo que definitivamente deseaba y estaba dispuesta a conseguir. Así que decidí entrar en una etapa de autodisciplina. Por el tiempo que fuera necesario, me propuse a forzarme a sonreír hasta que la sonrisa saliera natural. Realmente no me tomó mucho tiempo, ya que al ver la reacción en mis hijos era algo demasiado deleitoso.

Hoy en día, después de varios años de muchas sonrisas, mis dos hijos menores tienen una sonrisa dibujada permanentemente en sus rostros. Mi hija mayor se parece más a mí, con una personalidad seria. Pero no se tarda ni un segundo en regalarme una gran y dulce sonrisa cuando se la pido. Los tres se despiertan con una gran sonrisa en sus rostros, aun antes de abrir los ojos. ¡Es realmente un lindo cuadro a observar cada día!

Luego de adquirir el habito, me di cuenta que en realidad todas las cosas que uno hace se hacen mucho mas fáciles cuando sonreímos. Se me hace mas fácil corregirlos, enseñarles, ordenar la casa con ellos, etc. con una sincera sonrisa en mi rostro. Mi esposo, mis hijos y mi alma son beneficiados y bendecidos.